Foodtransitions impulsa la relocalización, la planificación estratégica y la gobernanza inclusiva

El proyecto Foodtransitions ha presentado sus resultados, centrados en fomentar la transición ecológica en ciudades españolas a través de la promoción de sistemas alimentarios sostenibles que garanticen el acceso a alimentos saludables para toda la población. Liderado por Daniel López García (IEGD-CSIC) y Ana Moragues-Faus (Universitat de Barcelona), y coordinado por Tanya Zerbian, el proyecto reúne a más de diez instituciones de investigación que, en colaboración con actores locales, han diseñado un marco socio-ecológico para apoyar políticas alimentarias inclusivas en ciudades como Valladolid, Barcelona, Madrid, Valencia y Córdoba.

Foodtransitions aborda el impacto de los sistemas alimentarios en el cambio climático, responsables de un tercio de las emisiones globales de Gases de Efecto Invernadero, y enfrenta el desafío de la inseguridad alimentaria que afecta al 14% de la población española. Su enfoque transdisciplinario analiza las configuraciones socio-ecológicas de los sistemas alimentarios urbanos y evalúa la efectividad de las políticas alimentarias y los procesos de gobernanza, ofreciendo herramientas para transformar las ciudades en líderes de la transición hacia sistemas más justos y sostenibles.

Entre los principales resultados se encuentra un informe sobre gobernanza de políticas alimentarias urbanas, que examina los casos de Córdoba y Valladolid. Si bien estas ciudades han implementado mecanismos de gobernanza multiactor, su efectividad es limitada debido a la falta de recursos y de integración con otras políticas urbanas como vivienda, transporte o salud. Se concluye que las políticas participativas son esenciales, pero no suficientes para lograr cambios estructurales a largo plazo.

Otro informe destaca los entornos alimentarios de Madrid y Barcelona, donde se observa que las poblaciones vulnerables tienen menos acceso a alimentos frescos y de calidad, pese a su disponibilidad. Estos entornos, catalogados como “obesogénicos”, favorecen el consumo de opciones menos saludables y más económicas. Además, se identifican “desiertos alimentarios” y “pantanos alimentarios”, áreas con acceso limitado a alimentos saludables, especialmente en zonas con alta presión turística y menor poder adquisitivo. El estudio sugiere intervenir en estos entornos para facilitar dietas más sostenibles.

El análisis sobre la relocalización de sistemas agroalimentarios, realizado en Madrid y Valencia, resalta la baja capacidad de autoabastecimiento, que no supera el 5%. La diversificación de la producción local y la planificación de infraestructuras agroalimentarias son clave para reducir la dependencia de sistemas externos y disminuir la huella ecológica. También se promueve el fomento de dietas más sostenibles, con menor consumo de productos animales, adaptadas a la capacidad ecológica local.

Foodtransitions evidencia la necesidad de integrar la alimentación en las políticas urbanas con un enfoque integral que conecte el sistema agroalimentario con el territorio y mejore los procesos de gobernanza participativa. Este marco propone avanzar hacia la seguridad alimentaria sostenible, promoviendo una transición justa que involucre a múltiples actores sociales y sectores de la administración.